A. Scarlatti (1660-1725) 

I. Tu sei quella che al nome; Bella dama di nome santa H. 743.

Cantata per soprano, flauto, due violini e basso continuo

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1. Introduttione

2. Recitativo
Bella dama de nombre santa
¿Tú eres aquella, que al nombre
parece justa, piadosa, y de los dioses
cada perfección en ti se encuentra?
¿Y cómo siendo bella, y cómo, si al volver de tu mirada,
no dais si no tormentos,
penas, y dolores amargos?
¡Ah! No bien corresponde
un nombre así si con dolor discierno
que tu nombre es mi tormento eterno.

3. Aria
Por tu nombre creí
que habría en ti piedad,
justicia y fidelidad,
más vislumbré entonces el error.
¿Si tú eres piadosa, porqué el corazón
tengo asolado?
¿Si es cierto, porqué despreciarme,
sin ofender tu corazón?

4. Recitativo
La fidelidad no encuentra remedio
en tu salvaje pecho,
¡que siendo fiel! ¿por qué tú fuiste tan cruel
con quien no es infiel?
Los dioses, sí, dioses,
vuelven sus ojos misericordiosos
a quienes ofrecen devotamente,
incienso, plegarias y ofrendas.
Mas tu salvaje corazón
no atiende a plegarias,
y piedad incluso niegas
a quien solo por piedad
te solicita amor.

5. Aria
El nombre no es
de santa en aquella
que al igual que los Dioses,
no siente piedad,
mejor el nombre de austera,
de orgullosa tirana,
que mata, que engaña,
con cruda maldad.

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A. Scarlatti

II. Quella pace gradita H.610.

Cantata per soprano, flauto, violino, basso e basso continuo

 

1. Sinfonía

2. Recitativo
Que la bien hallada paz,
que ahora no habita dentro de mi pecho
hace que mi propia vida odie y aborrezca; Amor sabes que sufro,
y he sufrido durante tantos años;
mas sólo recolecté sufrimientos.
Ahora esta pobre Alma,
que está cansada de sufrir, busca la calma.

3. Aria
Cruel tirano amor,
no más tormento, no,
no tanta pena.
Que este corazón cansado no más puede sufrir
semejantes cadenas.

4. Recitativo
Oh vosotros bosques bendecidos, cuyo seno alberga el silencio,
una paz placentera que a estar con vosotros me invita;
¡Oh cuánto!, ¡oh, Dios! envidio tu suerte querido pajarillo,
que inocentemente gozas entre agradables horrores
aquellos buenos amores.

5. Aria
Queridos bosques, lugares de paz,
yacer entre vosotros es lo único que ansía mi corazón
cansado de tanto penar,
ahora clamo concluir las horas más dichosas
lejos de las atenciones y del amor.

6. Recitativo
Aléjate de mí, tirano amor;
que esta alma está abatida por un
sueño feliz, en constante tormento,
que me oprime el corazón por tu causa
y me hace desear habitar en los bosques,
viviendo entre las bestias.
Sí, iré a visitaros, soledades amadas,
dad refugio a un infeliz corazón,
que dentro de vuestra oscuridad
espera encontrar reposo.

7. Aria
Contigo, melancólica tórtola, necesito vivir en compañía.
Donde el bosque es más frondoso,
donde más la arboleda es bella, permaneceré oculto para dar paz al alma mía.

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A. Scarlatti

III. Concerto in La minore per flauto, due violini e basso continuo

Allegro / Largo / Fuga / Piano / Allegro

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D. Scarlatti (1685-1757)

IV. O qual meco Nice cangiata.

Cantata per soprano, due violini e basso continuo 

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1. Introduzione

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2. Recitado
¡Oh, Cuán cambiada hacia mí hoy te veo, Nice!
¿y qué diferente de tu yo habitual te veo?. No, no lo haré
no me quejaré si ahora ya no suspiras por mí; si
Ya no lloras por mí, si ya no
deseas estar cerca de mí; pero finalmente no quiero que lo hagas
Ódiame, pero ódiame tanto como para no estar contigo.
Nunca sabrás - mujer malvada - con que
terrible sufrimiento, oh Dios, estás lastimando mi
corazón enamorado.

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3. Aria
¿Por qué al menos no decirme si ofendí a tu
hermoso corazón? ya que mi inocencia aparece culpable para
tí. ¿Por qué no me dices - ingrata y
cruel - qué puedes condenar en mí?
Abandona ahora tu silencio, vuelve tus ojos con amor
hacia mí, a tanta fe y amor constante por tí.

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4. Recitado
Dime, responde, mujer despiadada, di una falta mía,
dime un error. No, no te avergüences de decir
si has sido traicionada por mí; si has visto
cambiado mi deseo de amarte; si mi amor ha sido
infiel. ¿Alguna vez dije amar a otra mujer?
¿tal vez por juego? ¿He suspirado poco por
tí? ¿Me he separado de ti por un solo
instante? ¿Era posible ser aún más constante para
tí? ¿Por qué? ¿Por qué no hablas?
¿Olvidaste la promesa que hice de nunca verte como
enemiga? Tal vez quieras que te diga, tal vez esta sea
vuestra orden, que afirme haber disfrutado de una y
mil amantes, y haber cambiado constantemente.

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5. Aria
Realmente no quiero hablar, aunque tengo motivos para hacerlo,
pero entonces no sería el verdadero amante que sigo siendo. 
Si el amor no ha llegado con el tiempo 
a mostrar verdadero arrepentimiento en vuestro corazón,
Amor, al menos en este momento lo aprenderás con honor.

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DURACIÓN APROX.: 70 minutos